El próximo desafío será salado y ya estoy deseando que llegue.
Si queréis ver todas las tartas de mis compañeras podeis pinchar en el siguiente enlace.
Ingredientes
- Una calabaza de un kilo aproximadamente, luego pelada y asada puede quedarse en unos 800 gr.
- Una lámina de masa de hojaldre
- 200 gr. de azúcar
- Una cucharadita de canela molida
- 1/2 cucharadita de café de sal
- 1/2 cucharadita de jengibre molido
- 1/4 cucharadita de clavo molido
- Dos huevos
- Una lata de leche evaporada (Ideal)
- Unas gotitas de esencia de vainilla
- Azúcar para caramelizar (Opcional)
Elaboración
Cortamos y pelamos la calabaza y la ponemos en papillote para asarla. La ponemos al horno a 180º una hora o hasta que esté tierna.
Una vez este asada dejamos enfriar.
En un recipiente ponemos los 200 gr. de azúcar, la canela molida, la sal, el jengibre y el clavo molido. Mezclamos todo.
En un bol batimos los huevos y añadimos las calabaza machacada y le añadimos dos gotitas de esencia de vainilla.
Por último ponemos la leche evaporada y movemos poco a poco mezclando bien.
En un molde para tarta ponemos la base de hojaldre y ponemos por encima esta mezcla
Ponemos al horno unos 50 minutos a 180º , esto depende mucho de cada horno.
Probamos con un palito de brocheta hasta que salga limpio y apagamos. Dejamos enfriar.
Ponemos por encima un poco de azúcar y con un soplete la quemamos. Esto hará una lámina caramelizada muy rica.
La verdad es que es una tarta diferente pero muy buena.