Mi padre tiene un arbolito en su azotea y en el tiempo de ellos da muchos frutos. Como sólo me gustan a mi, pues nada, todas para mi. Yo las congelo y ahora he decidido hacer un bizcocho. El resultado es un olor intenso y un rico sabor a naranja. Tan solo duró una tarde de domingo.
Ingredientes
- 200 gr. de naranjitas
- 200 gr. harina
- 100 gr. de harina de maíz (maizena)
- Cuatro huevos
- Un yogur
- 300 gr. de azúcar
- 100 gr. de aceite
- Tres sobres de gasificante o un paquete de levadura
- Canela (opcional)
Elaboración
Ponemos el horno a calentar.
Lavamos, quitamos las pipas a las naranjitas y las trituramos.
En un bol mezclamos los huevos con el azúcar. Cuando esté bien mezclado añadimos el aceite y las naranjitas. Movemos muy bien.
Echamos el yogur, la harina, el gasificante o levadura y movemos muy bien, procurando que no se nos haga grumos. Si queremos, ahora podemos añadir la canela.
Echamos la mezcla en un molde de bizcocho que previamente tenemos untado de mantequilla.
Metemos al horno, que tenemos previamente calentando a 180º.
Dejamos cocer unos 30 minutos y probamos con una aguja si está en su punto (que no salga manchada).
Cuando ya está listo apagamos el horno y dejamos temperar unos diez minutos.
Sacamos y desmoldamos. Dejaremos enfriar en una rejilla.
El resultado, un bizcocho con un sabor a naranja intenso y para nada ácido.
Listo para comer.